sábado, 18 de octubre de 2014

Los hechos ocurrieron

Un fin de año solo en casa
pero estrenar camiseta interior
como vestirse de gala.
Un poco de humor.
Un poco de muerte basta.
Y todos los días señalados
que te señalaban
te acababan resbalando.
Siempre te dio igual
que me pudriera solo
el día de mi cumpleaños.
Ni siquiera te acordabas.
Yo prefería olvidarlo.

Para ti
yo nunca tuve padre
ni hermano, ni hermana,
ni amigos, ni trabajo.
Para ti
nunca hubo un antes
ni un después
sólo hubo un Nadie.
Y llegados a este punto
todo deja de importar.
El tiempo se ha detenido.
Nunca volveré a un lugar
donde nadie me espera.
Hay demasiados lugares así.
El tuyo no es especial.


Y llegará el fin de año.
Uno más en esta casa.
No más solo que el pasado.
Pero me acordaré de ti
y estrenaré pijama
como quien viste de gala.
Un poco de humor.
Que tanta muerte ya cansa.


Deja de temblar. Ya no hay motivo.
Ya no quedan páginas donde escribirnos.
Nuestra historia acaba dibujada sobre el suelo
con un pedazo de tiza.



A la altura de nuestra mejor marca.







 

No hay comentarios: