Un destello a destiempo.
El efecto flare en los ojos de un ciego.
Esa oportunidad perdida
que aún te saluda al otro lado de la calle.
Dos años y una pandemia más tarde
me sigues recordando y yo te odio.
¡Cómo me gustabas
y qué poco has dejado de gustarme!
Esa noche volví a fumar en sueños.
Accidentalmente alguien nos presentaba.
Tú reías mientras yo bajaba la mirada.
Ya nos conocíamos de memoria.
- En los Alpes australianos
nieva más que en Suiza...
¡Qué bien me sienta tenerte cerca!
Segundas partes de primeras fallidas
nunca fueron tan buenas...